SSC Napoli y Conte quizá no estén en el punto y final. Pero ya lo estuvieron el verano pasado
El 10 de noviembre, con el SSC Napoli cayendo 0-2 ante el Bolonia, parecía que Antonio Conte llegaba a un punto de inflexión. "Hablo de corazón, de ganas, de hambre. Aspectos que te llevan a hacer algo extraordinario como hicimos el año pasado. Nos está costando mucho; ahora mismo no somos equipo y me duele porque han pasado cuatro meses".
Un desahogo que viene de lejos. De cuando, en verano, estuvo a un paso de la Juventus, pero una reunión con De Laurentiis acabó con un borrón y cuenta nueva. Así no funcionan las cosas entre adultos. Hay un nudo gordiano que hay que desatar; de lo contrario, el problema reaparece a la mínima inestabilidad. Justo como ahora. La realidad es que Conte y De Laurentiis llevaban meses sin hablarse antes del Scudetto y luego se quiso arreglar todo con paños calientes. El riesgo es que todo lo construido el curso pasado se resquebraje. El quid, además, es el dinero: si hay dimisión, no habrá problema en aceptarla; si no, seguirán así, de desahogo en desahogo.
Hasta que la situación quede definitivamente comprometida. No está claro que no lo esté ya, pero el SSC Napoli no está lejos de los primeros puestos de la tabla y puede meterse de nuevo en cualquier pelea. Siempre que, al menos hasta junio, ambas partes logren llegar a un acuerdo.



