SSC Napoli, en Bolonia, la rajada más dura de la era Conte: primer cara a cara inmediato con la plantilla

El 2-0 encajado por el SSC Napoli en el Dall’Ara ante el Bologna FC no es solo una derrota dura sobre el césped: es el detonante de la rajada más dura, sincera y cruda de la era Conte. El técnico del SSC Napoli, visiblemente tocado, puso a la plantilla y al club frente a sus responsabilidades, abriendo una grieta que amenaza con pesar y mucho en la temporada partenopea.

El primer encontronazo serio llegó en el vestuario, nada más el pitido final. Tono alto, verdades sin filtros y un grupo obligado a mirarse al espejo en la víspera del parón. Luego, ante los micrófonos, Conte no bajó la temperatura; al contrario. “Estoy preocupado. Cinco derrotas en tres meses son demasiadas, no es casualidad. Esto no es suficiente para un equipo que debería haber arrasado en la Serie A”, sentenció.

El técnico habló de entusiasmo, arrojo, corazón: todo lo que ahora mismo falta. “No estoy haciendo un buen trabajo, no he entrado en los corazones ni en la cabeza de los jugadores. Es justo que el club lo sepa. Y ya lo sabe”. Dardo claro que anticipa un cara a cara tenso con De Laurentiis en las próximas horas. Conte tocó después un nervio sensible al volver sobre el décimo puesto tras el scudetto: “No hay esa química. Estamos cumpliendo el expediente. Y yo no voy a cargar con muertos”.

Energía positiva ausente, sentido de equipo evaporado, responsabilidades que compartir pero también que asumir: “La culpa es mía, pero en el fútbol no puedes hacer trasplantes de corazón”. Ahora llega el parón: tiempo para reflexionar, hablar y tratar de reconstruir. Pero el mensaje es claro. O se cambia ya, o el naufragio dejará de ser un riesgo para convertirse en realidad.