Dawidowicz: “¿Arabia? Solo tres semanas. El dinero importa menos que mi familia”
“Antes podía interesarme el dinero. Ahora jugaría gratis... casi”. Pawel Dawidowicz se ha quedado sin equipo, aunque en julio firmó un contrato de dos años con el Al-Hazem, en Arabia Saudí. Una aventura que duró poquísimo. “Tras terminar la temporada decidí ver otras cosas, cambiar. Había recibido ofertas de clubes de Serie A, pero quería probar algo distinto”.
Entonces, Arabia Saudí.
“Sí, me fui allí solo para la pretemporada, tres semanas. Luego llegó mi familia: tengo un niño pequeño y mi mujer está embarazada. Era realmente muy difícil estar allí, por varios motivos”.
¿Por ejemplo?
“Casi cada día tenía que ir al hospital para controles y era complicado. Nadie hablaba inglés, quizá tres personas en toda la ciudad”.
¿Sólo eso?
“No, las mujeres no pueden salir sin un hombre. Y deben ir cubiertas; sólo los ojos quedan descubiertos”.
¿Intentó cambiar las cosas?
“Sí, hice varias peticiones, pero siempre lo dejaban para mañana. Al final me harté y decidí que había cosas más importantes que el fútbol, como mi familia”.
Y volvió a Polonia.
“Sí, ahora estoy cerca de Gdansk. Me entreno con un equipo local y con un preparador personal, pero echo de menos los partidos. Sabía que así me quedaría un tiempo sin jugar, pero necesitaba centrarme en mi familia. No podía quedarme allí por cómo estaban mi mujer y mi hijo”.
¿Tenía ofertas?
“Sí, pero no me convencían. Había clubes donde podía empezar de inmediato, porque rescindí el contrato durante la ventana de fichajes. Podía firmar con cualquiera, pero tenía que arreglar algunas cosas; a nivel personal el momento era muy delicado por lo que pasó allí en tres semanas”.
¿Ahora está todo en orden?
“Sí, pero las Ligas ya han comenzado, sé que tengo que esperar. Creo que en diciembre puede pasar algo”.
¿Pero por qué eligió Arabia Saudí?
“Quería irme lejos, ganar más. Ahora no me importa tanto; me basta con seguir en Europa. Todo va bien, pero echo de menos el desahogo y la adrenalina de la competición para soltar la rabia que llevo dentro”.
¿Qué ofertas tenía?
“Varias, también de Serie A. Esperaba alguna de España y otra de Alemania. Pero había visto que en Arabia gastan mucho y pensé que la vida podía ser buena. Quizá en Riad sea mejor, pero donde estaba yo se hablaba únicamente árabe. No puedo ser siempre egoísta; a esta edad hay cosas más importantes que el dinero”.
Se habló de Venezia FC y SSC Bari.
“No diré qué clubes intentaron contactarme, pero por ahora ninguno me ha convencido con su proyecto”.
¿Cómo estaba en el Hellas Verona?
“Todo de diez. A mi familia le gustó mucho, estaba bien y no me faltaba de nada”.
Así que fue una decisión económica.
“La diferencia era grande, quise probar. Ahora quiero quedarme en Europa, porque tengo un hijo pequeño y mi mujer, por ahora, quiere seguir en Polonia. Yo viajaré solo estos meses y, si tengo dos días libres, puedo coger un vuelo y volver con ellos. Ir a Estados Unidos sería más difícil”.
¿Dónde preferiría jugar?
“Diría que en cualquier sitio. Es verdad que Italia, por el idioma, me lo pone más fácil. He estado allí muchos años, el aprendizaje es rápido, me meto muy pronto en las dinámicas. En Alemania todos hablan inglés, pero tienes que aprender alemán y tardaría un poco. Aun así, no le veo problema: si hay un buen equipo, voy de cabeza”.
Ha tenido a Tudor y a Juric…
“Para mí están entre los mejores entrenadores que he tenido. Desde Verona han llegado a la Juventus y al Atalanta, eso dice mucho. En el fútbol hay momentos en los que todo sale bien y otros en los que no tanto. Pero son de alto nivel”.
Juric fue destituido tres veces en un año.
“Pasa. Hasta que no encuentras el sitio adecuado y todo empieza a funcionar, poniendo las cosas en su sitio”.
Polonia e Italia corren el riesgo de quedarse fuera del Mundial.
“Esperemos que ambas selecciones consigan clasificarse. Creo que lo merecen”.
La última: si fuera entrenador, ¿a quién ficharía?
“Pregunta difícil, prefiero no dar nombres... pero digo Coppola. Joven, fuerte. Y como persona es muy estable”.



