Zortea: "El Bolonia es un salto en mi carrera. No cargo con el peso de los goles de la temporada pasada"
Nadir Zortea, lateral del Bolonia, habló en Radio TV Lega Serie A: "Es fácil estar siempre con una sonrisa cuando vives un entorno como el que hay aquí en Bolonia: hay un gran ambiente, nos queremos, estamos a gusto juntos y eso nos lo llevamos también al partido. La sonrisa es algo que define a nuestro vestuario y se ve también en el campo porque somos felices de jugar juntos: bromeamos, nos divertimos y los entrenamientos siempre van a buen ritmo".
¿Cómo se gestó su decisión de ir al Bolonia?
"Para mí, el Bolonia ha sido sin duda un salto en mi carrera; es un club que cada año pelea por objetivos mayores. En consecuencia suben las expectativas, la presión, la ambición por sacar resultados y, en lo personal, las ganas de demostrar que la gran temporada del año pasado no fue casualidad".
¿Qué ambiente se vive en el Dall’Ara? ¿Y cómo es la relación con la ciudad?
"Cuando jugamos en casa, el final del partido es uno de los momentos más emocionantes: se apagan las luces del estadio, todos cantan la canción de Cremonini (Poetica, n. de la r.), hay mucha alegría... especialmente tras una victoria como la lograda ante el SSC Napoli, con mucha adrenalina y una gran energía por parte de todos".
¿Cuál siente que es su verdadero rol en el campo?
"El míster tiene peticiones muy particulares y precisas: hay que pensar siempre. En lo que a mí respecta, estoy intentando ocupar un rol distinto al del año pasado y eso trae dificultades y algún error. Estoy trabajando mucho la salida de balón desde atrás: la temporada pasada, jugando más adelantado, recibía siempre por encima de la línea del centro del campo; ahora, en cambio, me toca generar juego y meterme por dentro. Detrás hay mucho estudio táctico con el cuerpo técnico. Siento que cada semana doy un pequeño paso adelante y eso me da energía y buenas sensaciones para seguir trabajando, con la convicción de que alcanzaré mi máximo potencial también en este nuevo rol".
¿Cómo le va con Italiano?
"El míster rebosa una energía increíble y la transmite a todo el grupo. Obviamente también mete mucha presión, sobre todo en los entrenamientos: quiere que las cosas se hagan siempre de la mejor manera. Exige mucho, especialmente a los laterales; con ellos construimos la jugada ofensiva: hay movimientos muy concretos que al principio quizá parecen raros, pero luego te das cuenta de que en el campo marcan la diferencia. Estoy aprendiendo muchísimo: cada día entra algo nuevo en mi bagaje de conocimientos y, para un jugador como yo, con ganas de aprender, esto es fantástico".
¿Cómo lleva las rotaciones?
"El míster cambia a menudo a bastantes jugadores; es algo muy suyo, no me había pasado antes. Durante la semana, al no saber quién va a jugar, todo el grupo se entrena al máximo: nadie baja el ritmo y el nivel general es muy alto. Creo que la utilidad de este método está en mantener a todos con la concentración al máximo: hay que estar siempre listos para salir al campo".
¿Nos cuenta el origen de su nombre?
"Fue mi madre quien eligió mi nombre: es de origen árabe, significa 'precioso' y también es una constelación. He de decir que me gusta".
La pasada temporada estuvo muy bien. ¿Pesa tener que confirmar ese nivel?
"No cargo con el peso de marcar los goles de la temporada pasada; si alguien me lo recuerda, significa que esperan mucho de mí. Ahora mismo no me supone presión: estoy más centrado en alcanzar un nivel alto en mi nuevo rol y repetir esos números desde otra demarcación. Por ahora es un proceso en curso, pero estoy seguro de que acabaré encontrando soluciones; no será fácil replicar esas cifras, pero lo intentaré".
¿Es más fácil quitarle minutos a Holm o a Orsolini?
"(ríe, n. de la r.) Ahora mismo está complicado. Son dos jugadores top; Emil ha empezado la Serie A de forma extraordinaria, es un futbolista al que estudio mucho: tiene los automatismos y los tiempos perfectamente afinados. Está jugando realmente bien y, para mí, es muy valioso para acelerar mi aprendizaje".



