De Ketelaere, gol y autoridad: debe convertirse en el líder del Atalanta BC
Reversionando una vieja canción, sobre todo al ver jugar al Atalanta, viene a la mente el tema: “Che finimondo quel capello biondo che si chiama De Ketelaere”. Un hit veraniego que, en el caso del belga, funciona los doce meses del año siempre que el 17 esté fino, sobre todo por el potencial del propio CDK en una Bérgamo acostumbrada a lo bueno con él arriba.
Charles no marcaba desde septiembre, ante el Lecce, pese a su esfuerzo constante por generar peligro arriba, donde a menudo el equipo se apoyaba en un chispazo suyo para intentar abrir el marcador: no en vano ha sido un fijo también para Juric, pese a los continuos cambios de once. La llegada de Palladino le ha colocado aún más en el centro del proyecto: si en Nápoles fue de los pocos que se salvaron, ante el Eintracht Frankfurt se convirtió en el mejor del partido. Delantero total: no solo marca, también hace marcar a sus compañeros. Precisión, visión de juego y, con Raffaele, la sensación de estar ante un futbolista con mucha libertad para moverse entre líneas, que a menudo se mete por dentro para poner balones peligrosos. Por el camino, además, su 7.º gol en competiciones UEFA con el Atalanta, que le permite superar a Papu Gómez y a Gianluca Scamacca.
Con De Ketelaere, sin embargo, sigue presente la cantinela de siempre. Si lo que fue su pasado en el AC Milan ya es solo un recuerdo lejano, al mismo tiempo es evidente subrayar que el chico debe convertirse en un líder mucho más constante: un líder ofensivo, viendo el potencial de la banda derecha junto a Bellanova. Ahora todo está en manos de Palladino para completar lo que su mentor Gian Piero Gasperini había empezado: con un hilo conductor claro, ese CDK que seguirá dando grandes alegrías al Atalanta.



