Por qué el Italia-Irlanda del Norte se jugará en Bérgamo y no en el Olímpico de Roma

«La idea es jugar en Bérgamo». Así, al término del consejo federal de hoy, Gabriele Gravina confirmó las informaciones: salvo sorpresa, Italia jugará en Bérgamo la semifinal de la repesca mundialista ante Irlanda del Norte, prevista para finales de marzo. Una decisión nada obvia, porque no hablamos de un estadio enorme.

¿Por qué Bérgamo y no, por ejemplo, el Olímpico? En resumen, el propio Gravina dio algunas pistas: "Hemos recibido una acogida extraordinaria y el estadio es perfecto para organizar este partido". La referencia era al duelo con Estonia, disputado en la New Balance Arena. Un recinto desde luego no gigantesco —de hecho, su aforo máximo es de 23.439—, pero en el que se escuchó aliento para la selección italiana: algo nada garantizado en estos tiempos de miedos y murmullos. Sus dimensiones, además, prácticamente aseguran el lleno: probablemente también habría pasado en Roma, pero en Bérgamo las gradas están más cerca del césped, no hay la distancia de una pista de atletismo y el calor se nota más. Sin olvidar los aspectos logísticos. Queda la duda de si no hubiera sido más oportuno vivirlo en un gran estadio, pero San Siro —escenario del primer gran batacazo mundialista en 2017 ante Suecia— está vetado por pura superstición, y del Olímpico ya se ha dicho. En cuanto a los precedentes, el choque de marzo será el quinto en Bérgamo: dos 5-0 (a Malta en 1987 y a Estonia en septiembre) y dos 1-1, en un amistoso con Turquía (2006, post Mundial) y en la Nations League ante Países Bajos en 2020.

Pero en Gales jugarán en el Millennium Stadium… A propósito: una de las objeciones más inmediatas tiene que ver con el distinto enfoque y el gran temor de un país que, antes de superar al primer rival, ya se pone a pensar en el siguiente, ese Gales que, por cierto, mientras tanto debe doblegar a Bosnia. En Cardiff, en realidad, no está dicho que la final se juegue en el monumental templo del rugby, el Millennium, de 75.000 asientos: a día de hoy, teniendo que disputarse allí ya la semifinal pocos días antes, al otro lado del Canal consideran más probable que se juegue en el Stadium of Cardiff, bastante más pequeño. Quizá sea pura estrategia; primero, hay que llegar.