La Fiorentina: diciembre, mes de la verdad. Se arranca en el Mapei y se prepara un auténtico éxodo
La permanencia, según el técnico de la Fiorentina, Paolo Vanoli, “passerà molto dalle gare di diciembre”. Así se expresó hace unos días el preparador piamontés al término del duelo de Conference contra el AEK. El mensaje es claro y directo: hay que puntuar ante equipos que, sobre el papel, les considerarán superiores. En el “calendario de Adviento” de la lucha por la permanencia, la primera “ventanita” que abrirá el conjunto viola será la del sábado 6 de diciembre, cuando Kean y compañía visiten el Mapei Stadium de Reggio Emilia para medirse al Sassuolo.
A partir de ahí, arrancará un mini ciclo que puede marcar la temporada. Dos partidos seguidos en casa, primero ante la Dinamo Kiev en la Conference League y después frente al Hellas Verona, un choque en el que no hay margen para tropiezos. Un triunfo en Europa recolocaría al equipo en la tabla continental de cara a la clasificación directa, mientras que los puntos contra el Verona valdrán oro en el campeonato, ante un rival que a día de hoy comparte el último puesto con la Fiorentina. Después, desplazamiento a Losanna, último encuentro de la fase de liga de la Conference, y otro compromiso en casa contra el Udinese. Por último, el acto final del año: el 27 de diciembre, en el Tardini de Parma, una cita que puede ser decisiva para encarar 2026 con otro ánimo. Un calendario apretado, exigente pero potencialmente favorable. Este es el cruce de caminos que espera a la Fiorentina: diciembre puede devolver el aire a Florencia o hundirla definitivamente.
Mientras tanto, la afición de la Fiorentina está lista para atender el llamamiento de Edin Dzeko y empujar con fuerza a un equipo en apuros. Ya se han vendido oltre 2000 biglietti per la trasferta a Reggio Emilia e la Curva Fiesole ha invitato tutti i tifosi viola a recarsi al Mapei Stadium: “En la hora de desconsuelo y de victoria”, reza nuestro himno, arranca el comunicado. “El amor incondicional por nuestra camiseta no conoce límites. Florencia, como siempre, estará presente con orgullo para salir de esta situación. El sábado, todos a Reggio Emilia con una bufanda y una bandera, unidos y compactos con un único objetivo: la victoria”.



