La ACF Fiorentina vuelve a ganar casi dos meses después: Kean y Gudmundsson doblegan al Dinamo de Kiev

La ACF Fiorentina vuelve a ganar casi dos meses después y lo hace imponiéndose 2-1 al Dinamo de Kiev. Primeros tres puntos para Paolo Vanoli, un soplo de aire fresco de cara al duelo ante el Hellas Verona. Los goles del conjunto viola llevaron la firma de Kean y Gudmundsson, con el empate momentáneo de Mykhailenko para los ucranianos.

Primera parte
La primera ocasión del partido llegó a los seis minutos y fue para los viola: balón en largo de Nicolussi Caviglia para Dodo por la derecha; el brasileño controló, se quitó la marca de Dubinchak, puso un centro al corazón del área y encontró a Dzeko, cuyo cabezazo se marchó por poco por encima del larguero. Diez minutos después, la Fiorentina dispuso de una doble ocasión clarísima para adelantarse: en un córner botado desde la derecha por Nicolussi Caviglia, Dzeko remató a bocajarro, pero el balón le rebotó a Kean; este, acto seguido, lo intentó a pocos metros de la línea, topándose con la intervención fortuita del portero Neshcheret. El gol estaba en el aire y la Fiorentina se desbloqueó poco después. Dodo recogió por la derecha, a la altura de tres cuartos, y puso un centro tenso y preciso que encontró la cabeza de Moise Kean. El ‘9’ del 2000 cabeceó con precisión, ayudado por una zaga rival poco contundente, y volvió a ver puerta mes y medio después.

Segunda parte
Al 50’, un mal despeje de Fortini dejó el balón en los pies de Kabaiev, que, desde la izquierda, chutó con potencia desde buena posición, y el tiro fue desviado hacia su propia portería por Pongracic. La jugada evidenció a una Fiorentina desconectada tras el descanso y, en el 54’, llegó el empate ucraniano con un zapatazo desde la frontal de Mykhailenko, que batió a De Gea en el segundo tiro a puerta de los visitantes. El gol espoleó a la Fiorentina, que en el 57’ rozó el nuevo tanto, pero Kean perdonó en el segundo palo y no encontró portería a bocajarro con la meta vacía. En el 67’, Vanoli cambió la cara al equipo: se fue Viti, entró Kouame y el dibujo pasó a un 4-4-2. La apuesta salió bien, porque los viola volvieron a mandar y encontraron el 2-1 en el 74’: incursión por la izquierda de Parisi, que avanzó varios metros con la pelota y sirvió a Kean en el área con un centro preciso. El delantero cabeceó, encontró la parada del guardameta, pero nada pudo hacer ante el rechace de Gudmundsson. La Fiorentina pudo sentenciar en el 87’ con Kean, que se plantó solo y golpeó con potencia, pero demasiado centrado. Un error que, en cualquier caso, no empañó el regreso a la victoria de los viola casi dos meses después de la última.