Todo parte de la decisión de Conte de seguir en el SSC Napoli: Hojlund-David puede convertirse en otra sliding doors como la de McTominay-Brescianini
11 de mayo de 2025. Antepenúltima jornada de liga, el SSC Napoli, en pleno pulso por el Scudetto con el Inter FC, recibe al Genoa CFC. El partido, programado a las 20:45 en el estadio Diego Armando Maradona, terminará 2-2 y dejará aún más abierto un pulso por el Scudetto que los partenopeos se llevarán solo en la última curva. En la última jornada. Antes de ese choque, la cúpula del SSC Napoli se reúne en la ciudad con el agente del delantero canadiense Jonathan David, entonces en el LOSC Lille y a punto de quedar libre del club francés. Aquel encuentro sienta de facto las bases de un acuerdo entre las partes. De hecho, el SSC Napoli y David alcanzan un principio de acuerdo que aguanta varias semanas. Sí, porque De Laurentiis y Manna, que hasta la conquista del Scudetto y también después no tenían certezas sobre el futuro de Antonio Conte, siguen adelante con contactos y negociaciones y dejan apalabrado al delantero nacido en 2000. Lo dejan virtualmente atado a la espera de las firmas, que debían llegar tras el final de la temporada. A inicios de julio.
En esas mismas fechas en las que el SSC Napoli ata a David, el ex director general de la Juventus, Cristiano Giuntoli, señala a Rasmus Hojlund como objetivo número uno para la delantera bianconera. El ariete danés, que ya la pasada primavera tenía claro que saldría del United, era un gran objetivo de la entidad turinesa, que en abril estaba lejos de tener seguro retener a Kolo Muani (y de hecho no lo retendrá) y de resolver el culebrón Vlahovic (y, de hecho, no lo ha resuelto).
David al SSC Napoli, Hojlund a la Juventus. Nada más terminar la pasada temporada, ese era el escenario más probable. Un escenario que no se materializará porque después sucede lo que todos sabemos. Tras levantar el Scudetto, Aurelio De Laurentiis convence a Antonio Conte para que siga. Lo hace garantizándole inversiones importantes para ampliar la plantilla y, sobre todo, plena autonomía en los nombres. El técnico salentino lo medita, acepta, elabora una lista de objetivos y descarta a Jonathan David: no es un delantero adecuado para su idea de fútbol. Prefiere a Lorenzo Lucca y luego, tras la lesión de Lukaku, pide al club apostar todas las fiches restantes por Rasmus Hojlund. Puede hacerlo porque el danés, en agosto, seguía en el mercado, ya que la Juventus, mientras tanto, había revisado por completo sus planes tras el divorcio con Giuntoli y la llegada de Comolli. Hacía tiempo que había abandonado la pista del danés para volcarse en Jonathan David. El primer fichaje de la nueva etapa.
Vista hoy, y sobre todo a la luz del partido del domingo por la noche, la sliding doors parece clamorosa. Y explica, una vez más, la importancia del mercado en el destino de una temporada y la necesidad, al máximo nivel, de contar con un entrenador con mando y las ideas claras. Con su decisión de seguir en Nápoles (y, por tanto, de no regresar a la Juventus), Antonio Conte provocó también un switch de nueve que empieza a recordar lo que ocurrió un año antes en el club de De Laurentiis. También entonces era agosto y, tras haber pasado el reconocimiento médico a Brescianini, el SSC Napoli recibió el OK del Manchester United para la salida de Scott McTominay. En ese momento 'liberó' al centrocampista del Frosinone, que poco después se marcharía al Atalanta BC, y fue con todo a por el escocés. Por el que acabó siendo el mejor jugador de la última Serie A. Ahora, con el caso David-Hojlund, no estamos (todavía) en ese nivel, pero Conte, con el danés como nueve, tiene la tranquilidad de que Lukaku puede volver sin prisas. En cambio, el ariete canadiense, más de cinco meses después de su aterrizaje en Turín, aún no tiene claro cuál es su rol en esta Juventus.



