Derbi de Turín: identificados 50 ultras del Torino y evitados los choques con los juventinos
Un año después de los graves disturbios ocurridos en la zona de la Gran Madre, en Turín, la policía volvió a vigilar de cerca la víspera del Derbi della Mole entre Juventus y Torino, que arranca en cuestión de minutos, y evitó nuevos episodios de violencia. Durante la noche, la Digos identificó a unos 50 ultras del Torino tras seguir en tiempo real los movimientos de ambas aficiones, con el objetivo de frustrar cualquier intento de contacto.
Los investigadores temían que se repitieran las escenas de noviembre pasado, cuando ambos grupos se enfrentaron con palos, cinturones y petardos caseros. En aquella ocasión, 23 personas fueron denunciadas y 73 recibieron un Daspo. Según fuentes locales, unos 150 ultras bianconeri se reunieron en Moncalieri, cerca de la sede de los Drughi; en el grupo habría también aficionados ya sancionados con Daspo. Alrededor de la medianoche, sin embargo, los seguidores juventinos abandonaron por su cuenta el punto de reunión, sin intentar acercarse a los rivales.
Entre tanto, muchos aficionados del Torino se habían reunido frente a un quiosco en corso Agnelli, cerca de la Curva Maratona, y luego se desplazaron en coche hacia la Piazza Vittorio Veneto y la zona de la Gran Madre, epicentro de la movida turinesa, con la esperanza de cruzarse con los juventinos. El área ya estaba bajo control gracias a la presencia de la Digos y de unidades antidisturbios, que interceptaron e identificaron al grupo en las inmediaciones del Lungo Po Cadorna y de los coches estacionados. El operativo se saldó sin contactos ni tensiones: sobre las 2:30 los aficionados del Torino abandonaron la zona, evitando nuevos incidentes.



