Gleison Bremer, el único insustituible en la Juventus: cero derrotas con él sobre el césped
La Juventus tiene dos caras. Una sin Gleison Bremer y otra con él. Es un equipo con doble personalidad, completamente distinto de un momento a otro. Con él sobre el césped: seis victorias y un empate en Serie A; además, tablas —afortunadas y en el último minuto— ante el Borussia Dortmund en Champions. Sin él: solo 13 puntos en 10 jornadas de Serie A.
Los números no son la verdad absoluta, pero dibujan una tendencia bastante clara. Hay una Juventus que se siente más fuerte, seguramente más segura, con el brasileño en el once. Y otra más frágil, en lo psicológico y en lo táctico, cuando no está. Puede ser casualidad, pero ya el curso pasado con Thiago Motta, hasta la lesión de Bremer ante el RB Leipzig, todo marchaba de maravilla. Luego se torció de golpe: llegó a encajar siete goles entre Atalanta y ACF Fiorentina en dos partidos, un peaje saldado con la destitución en el banquillo.
Así que 2026 se antoja clave para Bremer, que viene de un año y dos meses con poco fútbol por una rotura del cruzado y una lesión de menisco. Después llegará el mercado: tiene una cláusula de rescisión de 55 millones de euros, negociada hace dos años cuando ya llamaban a su puerta clubes ingleses dispuestos a pujar. Y Bremer, el próximo curso, tendrá "solo" 29 años, por debajo de ese umbral psicológico de la Premier para poner cifras importantes.



