«Ni ganando habríamos pasado». La mentira de Vanoli refleja el caos de la Fiorentina

«Quedémonos con lo positivo. Aunque hubiéramos ganado, no habríamos pasado directamente a octavos». En la enésima noche para olvidar de la Fiorentina, derrotada 1-0 ante el Lausana, llegaron después del partido las declaraciones de Paolo Vanoli, técnico viola, que, si cabe, agravaron aún más la situación y el clima de caos que sigue impregnando el entorno viola. La premisa del entrenador es errónea: con los números en la mano, si la Fiorentina hubiera ganado por dos goles de diferencia en Suiza habría terminado octava y habría pasado directamente a la siguiente ronda, sin tener que pasar por los playoff de febrero.

El momento de la Fiorentina es dramático, deportivamente hablando, y este tipo de "mentiras" no ayuda precisamente a calmar el ambiente, porque poco o nada se podía rescatar del partido de ayer y quizá tocaba hacer solo autocrítica, algo que, por otra parte, el propio Vanoli acabó reconociendo. Pero plantarse ante las cámaras sin saber cómo estaban realmente las cosas no hace sino reflejar el caos extremo que vive la Fiorentina, obligada una vez más a reaccionar a partir del domingo.

El Udinese visitará el Franchi a las 18:00, y la Curva Fiesole, el corazón del tifo viola, ha anunciado que dejará vacío el estadio durante los primeros 20 minutos. Porque Florencia está cansada de ver actuaciones indignas como la de ayer y también de escuchar inexactitudes en las distintas entrevistas. Se han dicho muchas palabras, quizá demasiadas; ahora, en casa de la Fiorentina, ha llegado definitivamente la hora de pasar a los hechos.