Por fin Stulic: primer gol en la Serie A y el Lecce gana y convence. Pisa, tercer KO seguido
Un mal partido del Pisa, en su tercera derrota consecutiva. Y una gran actuación del Lecce. ¿Resultado final? 1-0, quizá corto para los salentinos. Pero da igual: lo fundamental eran los tres puntos y se quedaron en casa. Di Francesco celebra gracias al primer gol en la Serie A de Stulic, que entró tras el descanso por Camarda y, por primera vez, fue decisivo. El Via del Mare festeja. Para Gilardino, en cambio, muchas cosas que pensar.
Un Lecce desafortunado, pero peligroso
El arranque fue aciago para el Lecce. A los nueve minutos, poco menos, Di Francesco recibió una mala noticia: problema muscular para Berisha, que se marchó en camilla casi entre lágrimas; cambio obligado, Kaba al campo en su lugar. Aun así, los salentinos se mostraron superiores al Pisa. En una primera parte de menos a más, Coulibaly fue de los más peligrosos, primero con un disparo con rosca y luego con un gran pase para Sottil, que a su vez encontró a Pierotti, pero este, a puerta vacía, remató centrado.
Faltó la estocada
En líneas generales, el bloque del Lecce se mantuvo alto, mientras que el Pisa se fue replegando. Como es lógico, se jugó cada vez más en la mitad defensiva de los toscanos. Pero en los últimos metros a Camarda y compañía les faltó algo. Sottil intentó encender la luz y se atrevió contra toda la zaga al final del primer acto, pero no sacó más que un córner. El Lecce buscaba la estocada definitiva, pero no la encontraba. El Pisa deberá cambiar el chip.
La primera en la Serie A de Stulic
El guion no cambió tras el descanso: el Lecce llevó el peso y el Pisa sufrió para reaccionar. Salvo un tramo en el que los visitantes intentaron estirarse, también la segunda parte fue de claro color local. Y el problema del gol lo resolvió Stulic en el 72'. Entró por Camarda y, apenas cinco minutos después, el nueve firmó su primer tanto en la Serie A. La jugada la cocinaron los recién ingresados: Banda dejó clavado a Caracciolo y puso un centro magnífico para Stulic. El ariete se adelantó a Albiol y puso por delante, con todo merecimiento, a los locales. Y el 1-0 aguantó, sin apuros, hasta el pitido final.



