A la ACF Fiorentina le hace falta un milagro… al estilo Mazzarri. Pero este equipo tiene la mirada perdida

Peor que esto, solo queda seguir cavando. La ACF Fiorentina cae también en el campo del US Sassuolo, se derrumba anímicamente y en la clasificación: los viola, tras catorce jornadas de liga, apenas han sumado seis puntos. El Hellas Verona disputa esta noche un delicado duelo en casa ante el Atalanta: si no fuera un partido de tanta dificultad, el farolillo rojo en solitario para el equipo de Paolo Vanoli estaría a la vuelta de la esquina. Y el milagro —porque a estas alturas eso es lo que necesitaría la ACF Fiorentina para salvarse— se ve todavía más lejano.

El precedente. No es fácil encontrar un equipo que, a estas alturas de la temporada, estuviera tan hundido y luego lograra salvarse. Hay un antecedente, lejano en el tiempo y también por dimensión del club: en la 2006/07, tras 14 jornadas, la Reggina de Walter Mazzarri tenía apenas seis puntos en la clasificación. En aquel caso, nada de debacle futbolística: por medio había una penalización de once puntos en total. Al final del campeonato, el conjunto calabrés cerró con 40 (51 ‘sobre el campo’), firmando una permanencia por la que nadie en Reggio Calabria habría apostado.

Si las condiciones son distintas —porque a la ACF Fiorentina no la han sancionado, pero se penaliza sola cada vez que salta al campo—, precisamente ese matiz marca la diferencia. O quizá no, eso esperan los aficionados viola. Aquel equipo, como cualquier conjunto que en situaciones similares logró salvaciones inverosímiles, salió a competir de la primera a la última jornada con el cuchillo entre los dientes y mirada de tigre. Los viola, reforzados por un mercado de fichajes aparentemente suntuoso, pensaron que no hacía falta. Ahora muestran la mirada apagada de quien no sabe por dónde tirar. Y para un técnico, incluso para alguien como Vanoli, que acaba de aterrizar, eso es lo más preocupante.