De rey de Anfield a sombra de sí mismo: Mo Salah, emblema de un Liverpool en crisis
No hace mucho, la renovación del contrato de Mohamed Salah se consideraba 'asunto de Estado' en Anfield. El egipcio, de 33 años, cerró la pasada temporada con cifras estratosféricas: 34 goles y 23 asistencias, clave en la conquista de la 20.ª Premier League del Liverpool. Pero aquel futbolista descomunal admirado hace apenas unos meses hoy parece un recuerdo lejano.
En esta temporada, Salah está irreconocible. En sus últimos 10 partidos con el Liverpool apenas ha marcado dos goles y su capacidad para generar juego y amenazar la zaga rival se ha desplomado. Ante el Manchester City su actuación fue, como poco, decepcionante: cero disparos a puerta, una ocasión clara desperdiciada, ningún regate completado en tres intentos y dificultades constantes para ayudar al lateral derecho Conor Bradley a contener a un desatado Doku. Jamie Carragher ha sugerido incluso limitar sus apariciones fuera de casa, visto su estado físico y futbolístico actual.
Las cifras del curso confirman la caída: 5 goles y 3 asistencias en 16 partidos, por los 9 goles y 9 asistencias del mismo tramo en la 2024-25. Incluso el técnico Arne Slot quitó hierro al asunto, subrayando que Salah es humano y que el mejor nivel llegará. Pero la presión va en aumento. The Sun habla de Salah como 'la mayor preocupación' para los Reds y advierte del riesgo de que, con 33 años, ya haya tocado techo. Tras su renovación hasta 2027, afición y club esperan el regreso del Faraón, capaz de liderar al equipo hacia la remontada en la Premier League.



