AS Monaco 100-95 Real Madrid | Un gran Campazzo no evitó la derrota

Primeras posesiones muy favorables al AS Monaco, que impuso su ritmo en este comienzo gracias a un acierto altísimo en sus tiros, mientras que al Real Madrid le mantuvo vivo la captura del rebote ofensivo gracias a un gran Edy Tavares en la zona. También por el trabajo de Mario Hezonja, tanto desde el triple como en las penetraciones, ya que el croata tomó las mejores decisiones para tener un marcador igualado con el paso de los minutos. De hecho, los minutos finales se caracterizaron por un caboverdiano completamente imparable por dentro, ya que ningún pívot local fue capaz de plantarle cara, y ello hizo que los madridistas tuviesen una pequeña ventaja de cara al final de periodo, aunque para el segundo cuarto desapareció en acciones cuestionables.

Ya en este segundo periodo, el Real Madrid siguió jugando a lo mismo, ya que el resultado fue igual de bueno. En este caso, quien siguió en la cancha fue David Krämer, sobre todo para defender a los exterior del AS Monaco, y funcionó, al menos en este apartado, ya que en ataque sufrió. De hecho, solo Theo Maledon funcionó en el ataque madridista, ya que sin Hezonja en cancha, él se encargó de llevar mayor peso con balón. Tuvo que salir el croata a poner orden, y entre las defensas a Nikola Mirotic y algún triple suelto, los de Sergio Scariolo pudieron mantenerse a flote, ya que el resto de jugadores fueron algo planos. Y cuando hubo un tramo de mayor intensidad atrás, sobre todo con un Tavares inamovible en tapones, los árbitros decidieron señalar varias faltas realmente incomprensibles que dieron oxígeno a los locales.

Tras el paso por vestuarios, AS Monaco puso la directa, y con un 8-0 de parcial congeló al Real Madrid, que llegaba con buen ritmo tras el segundo cuarto. Nuevamente, Hezonja tomó el mando, al menos desde la defensa, ya que en ataque hubo un cierto cortocircuito hasta que Facundo Campazzo lideró con varias acciones positivas de forma consecutivas, aunque la asignatura pendiente fue el rebote, sobre todo defensivo. Para el final del tercer cuarto, los blancos subieron su porcentaje en el lanzamiento de tres, y el tiro de Chuma Okeke desde la esquina fue vital para rebajar tensiones, aunque no fue lo único que hizo el georgiano. Otros dos puntos, esta vez desde el libre, fueron suficientes para empatar el partido, y mandarlo a los últimos diez minutos con mejor cara.

El último cuarto empezó con tiros errados por parte de los dos equipos, así como con un aumento de intensidad en las defensas. Al principio se impuso el Real Madrid gracias al inmenso trabajo de Gabriel Deck y Okeke en la pintura, pero eso no fue suficiente para parar al AS Monaco y sus exteriores. De hecho, Nikola Mirotic anotó dos triples seguidos, y con ello congeló del todo el buen momento madridista, aunque todavía quedaba tiempo para enmendarlo. No fue así, pues los locales enlazaron varias acciones atrás de éxito, sobre todo con un Ellie Okobo espectacular en su efectividad. Solo Campazzo intentó evitar la derrota, y el minuto final fue de auténtico infarto, pero los madridistas cayeron irremediablemente.