Ojo: "Me encantaría ser el número 10 del Real Madrid"

Arda Güler ha dado un giro de 180 grados a su situación en el Real Madrid en apenas unas semanas. El joven talento turco pasó de ser un habitual del banquillo, con apariciones testimoniales durante buena parte del curso, a convertirse en una pieza relevante dentro del esquema de Carlo Ancelotti. El cambio de sistema al 4-4-2, motivado por distintas circunstancias, le ha abierto las puertas del once y, desde entonces, ha respondido con actuaciones notables que le han permitido ganar peso dentro del equipo.

El futbolista turco ha hablado de forma abierta en una carta para The Players Tribune donde ha contado sus planes en el Real Madrid dejando claro sus sueños: “Hay muchos más sueños en mi cuaderno. Quiero ser un jugador importante del Real Madrid. Quiero ganar la Champions League. También me encantaría ser el número 10 de este club. Quiero liderar el camino para una nueva generación de jugadores turcos”. De esta manera, heredaría el dorsal de Luka Modric.

SU RELACIÓN CON ANCELOTTI

El propio Güler ha destacado también cómo es su relación con Carlo Ancelotti: “Desde el principio, Ancelotti se convirtió en una especie de padre para mí. Pero era divertido porque bromeaba conmigo, sobre todo, y yo todavía era un niño con los ojos muy abiertos que intentaba asimilar el club más grande del mundo. Nunca me daba cuenta de cuándo hablaba en serio, ¿sabes?”

Un Ancelotti con el que apenas ha jugado en estos dos años dejando claro que no ha sido fácil: “Estar en el banquillo no es fácil. Cuando ganamos la Champions League, no tenía ganas de levantar el trofeo, porque no había aportado mucho en el campo. Por eso me dio tanta vergüenza cuando Ancelotti me dio el micrófono en la Cibeles. No tenía pensado subir al techo del autobús, porque estaba muy cansado, y recuerdo que dos amigos me escribían: "¿Dónde estás? No te vemos". Estaba abajo hablando con Kroos y Modrić, y Modrić me preguntó si Mourinho iba al Fenerbahçe. Mis amigos me dijeron: "¿Estás loco? ¡Acabas de ganar la Champions! ¡Sube a celebrar!". Soy así. No me basta con ganar un título. Tengo que sentir que me lo he ganado”.