Gyökeres, como Isak: mucha inversión, poco rendimiento. Y en la jerarquía interna corre el riesgo de seguir cayendo
El depredador ha perdido el apetito. Viktor Gyokeres atraviesa un bache en el Arsenal FC. Fichado por 65,8 millones de euros tras un largo tira y afloja con el Sporting CP, el delantero sueco, que viene de una temporada descomunal con 54 goles en 52 partidos, está teniendo problemas para encontrar continuidad y colmillo con la camiseta de los Gunners. Tras 19 apariciones en todas las competiciones, apenas suma seis dianas: cuatro en la Premier League y dos en la Champions League, cifras decepcionantes para un rematador puro llamado a ser la referencia del ataque de Mikel Arteta.
El gran problema parece ser su adaptación al juego y al estilo del Arsenal. Gyökeres aparece a menudo poco involucrado y le cuesta encontrar los espacios adecuados para hacer daño. Pese a ser el máximo goleador de los gunners en liga, comparte ese liderato con Bukayo Saka, Eberechi Eze y Leandro Trossard, síntoma de un rendimiento por debajo de lo esperado. La lesión de noviembre, además, abrió la puerta a Gabriel Jesus y Mikel Merino para demostrar que son alternativas de garantías, añadiendo aún más presión sobre el sueco.
Arteta predica paciencia, pero la competencia interna es alta y la posición del sueco no está asegurada. El mensaje es claro: Gyökeres debe adaptarse rápido y recuperar el olfato goleador para no perder terreno en la jerarquía ofensiva del club. La temporada es larga, pero las oportunidades empiezan a escasear.



