Derbi ganado ante el Newcastle, pero con los pies en el suelo. La sorpresa Sunderland sueña a lo grande

El Sunderland no deja de sorprender y se lleva también el derbi más sentido del noreste de Inglaterra. Los Black Cats tumbaron por la mínima al Newcastle (1-0), asestando un golpe duro, en lo deportivo y en lo simbólico, a los ricos y odiados rivales. Un triunfo con sabor a revancha, en lo que Sir Bobby Robson definía como "el derbi más grande y más caliente del país".

El último precedente aún escocía. En enero de 2024, en la FA Cup, el Newcastle United había pasado por encima del Sunderland con un 0-3 en el Stadium of Light, celebrándolo a lo grande ante su afición desplazada. Esta vez, la escena se invirtió. Al término del partido, fueron los hinchas del Sunderland quienes se dieron el gustazo, celebrando un éxito que vale mucho más que tres puntos. El choque se decidió al inicio de la reanudación, en el 46’, en una acción cruel para las Urracas: a centro del francés Nordi Mukiele, Nick Woltemade cabeceó el balón a su propia portería. Un gol en propia que hizo estallar el estadio y aumentó la frustración del Newcastle, incapaz de reaccionar.

El triunfo catapulta al Sunderland al séptimo puesto de la Premier League, con cuatro puntos de ventaja precisamente sobre el Newcastle, duodécimo. Un resultado que certifica la temporada extraordinaria de los recién ascendidos dirigidos por Régis Le Bris. Llegado en el verano de 2024, el técnico francés ya logró un ascenso y está sorprendiendo a todos también en la máxima categoría, tras gestas como la victoria ante el Chelsea. Pese al entusiasmo, Le Bris se mantiene comedido: "Es una victoria merecida, que hace felices a la afición y a la región, pero hay que pensar ya en el próximo reto". El Sunderland sueña, pero con los pies bien plantados en el suelo.