Genoa, ¿pagará Ottolini por todos? En verano, solo ventas. Luego cesiones y un jugador libre
 TODOmercadoWEB.es
TODOmercadoWEB.esEl director deportivo Marco Ottolini, con un pie fuera, y el entrenador Patrick Vieira sigue en el banquillo. El Genoa, tras otra noche para el olvido de la temporada, debería arrancar así. Con un técnico que, después de la derrota en casa contra el Cremonese, tendrá una última bala, casi con total seguridad dentro de cuatro días en Reggio Emilia ante el Sassuolo. Y con un director deportivo que podría pagar el pato por todos de inmediato: tras semanas negociando la renovación y vinculado insistentemente a la Juventus, Ottolini es señalado hoy por la propiedad por un mercado de fichajes que no está dando los resultados esperados. El Genoa tiene el peor ataque de la Serie A y una de las peores defensas; sobre todo, es colista y aún no sabe lo que es ganar tras nueve jornadas.
¿Pero qué mercado de fichajes ha hecho el Genoa? El dato que salta a la vista es el de los fichajes en propiedad: solo uno, el mediapunta rumano Nicolae Stanciu, que estaba libre. Luego, una larga colección de cesiones: de Onana a Colombo, pasando por Gronbaek, Carboni, Ostigard y Cornet. En muchos casos hay obligación de compra condicionada al cumplimiento de determinados objetivos; en ninguno, la certeza de que sigan la próxima temporada.
Muy distinto, en cambio, en el capítulo de ventas. El Genoa este verano ingresó unos 55 millones de euros gracias a tres operaciones de calado. Entraron cerca de 18 millones por la venta en propiedad a la ACF Fiorentina de Albert Gudmundsson; 20 por el traspaso de Koni De Winter al Ac Milan; y 17 más bonus por la salida en propiedad al Atalanta BC del nacido en 2008 Honest Ahanor. También se marchó, tras cuatro temporadas, Mattia Bani, un pilar de la zaga que puso rumbo al Palermo.
Un mercado que ha permitido al Genoa presentar el último balance con una clara mejoría y que irá aún mejor dentro de un año, cuando se computen también las ventas de Ahanor y De Winter. Todo, eso sí, a costa de la inversión y de la plantilla: no es la mejor carta de presentación para el nuevo propietario, Dan Sucu. Ahora el que pagará será Ottolini, pero las responsabilidades de un mercado tan desequilibrado hay que buscarlas más arriba.











