Real Madrid 82-70 Bilbao Basket | Victoria balsámica en el Movistar Arena

Real Madrid y Bilbao Basket se veían las caras con dinámicas diferentes. Los blancos fallaron en una semana clave de Euroliga; el martes fue arrollado por un buen Valencia Basket en el Roig Arena y el jueves cedió el invicto en casa frente a Panathinaikos. Los de Scariolo tenían el objetivo de minimizar daños y recuperar las buenas sensaciones con las que salió del Palau después de vencer holgadamente al FC Barcelona hace nueve días. Los vascos, por su parte, llegaban al Movistar Arena intercalando tres victorias con tres derrotas y siendo octavos en la clasificación del campeonato doméstico.  

QUINTETOS:

- Real Madrid: Kramer, Campazzo, Hezonja, Deck, Tavares. 

- Bilbao Basket: Frey, Jaworski, Petrasek, Hlinasn, Lazarevic

BILBAO BASKET SE LLEVÓ EL PRIMER TIEMPO

Los primeros compases del partido estuvieron marcados por la efervescencia de Kramer. El alemán fue el autor de los primeros puntos del partido. El Real Madrid intentó ser intenso desde el inicio, sabiendo que tenía un rival duro de roer en frente. El ritmo anotador de los blancos en el primer cuarto estuvo comandado por el ya mencionado Kramer (4 pts), Hezonja (7 pts) y Deck (4 pts). Bilbao Basket intentó responder con Jaworski, Lazarevic y el exmadridista Pantzar, ovacionado antes del salto inicial. Precisamente, los visitantes mejoraron con la entrada de Melwin, que cogió las riendas en ataque de los bilbaínos. Sin embargo, la entrada de Maledon (8 pts. desde el banquillo) fue determinante para que los de Scariolo se marcharan siete arriba (23-16)

Dos triples seguidos de Llull y un gran tapón de Garuba abrieron la veda del segundo cuarto. La respuesta de Bilbao Basket llegó con cinco unidades consecutivas que consiguieron acercarles a dos puntos de los blancos. Los vascos enlazaron varias posesiones viendo canasta y dieron caza a un Real Madrid que siguió el intercambio de golpes en ataque gracias a Edy Tavares. A falta de 35 segundos para el descanso, los de Jaume Ponsarnau tomaron su primera ventaja con un mate espectacular de Krampelj y un tiro desde el 6´75 de Normantas (39-43). El Movistar Arena despidió al equipo con una sonora pitada que mostraba el malestar de la afición con el juego de los suyos.

MEJORÍA Y VICTORIA BLANCA

Mario Hezonja intentó calmar los ánimos con la primera canasta del segundo acto del encuentro, pero un triple liberado de Pantzar tras una buena transición de Bilbao devolvió el "run run" a las gradas del Movistar Arena. El Real Madrid subió una marcha en intensidad y le fue comiendo terreno a los vascos poco a poco, pero una falta en el tiro más allá de la línea de tres hizo que Normantas situara seis arriba a los suyos a falta de 4 minutos para el final del tercer cuarto. Scariolo movió el banquillo y la entrada de Maledon y Llull le cambió la cara en ataque al equipo. Dos acciones consecutivas del francés -canasta y penetración rematada por Tavares- situaron a los blancos a tres puntos a falta de 180 segundos. Una buena jugada entre ambos provocó un 2+1 celebrado con rabia tanto por la afición como por los jugadores. Por contra, Bilbao Basket mantuvo el pulso hasta la pausa y llegó tan sólo un punto por debajo en el electrónico (63-64).

El último asalto no podía llegar más igualado. El partido iba entrando en el "territorio Llull" y el menorquín no falló a la cita. Una gran canasta y una asistencia del "23" a Garuba metió de lleno a los madridistas en el partido. El Movistar Arena se contagió de la energia de Sergio, que hizo que el Real Madrid le metiera un parcial de 7-0 a Bilbao Basket en los primeros dos minutos. Los de Scariolo hicieron un gran esfuerzo coral en defensa que les sirvió para secar a los vascos. Pantzar lo intentó, pero los Abalde, Okeke y Ousman le cerraron la puerta en la pintura. Los de Ponsarnau se desinflaron en un momento clave y los blancos no perdonaron e hicieron buena su superioridad individual en la recta final. Las imprecisiones de ambos conjuntos, Maledon y Campazzo pusieron el +10 a falta de 1:44 para el término del encuentro. Los merengues se dieron un respiro y cerraron el choque con solvencia.

Con este triunfo, el Real Madrid consigue maquillar una semana agridulce debido a sus dos derrotas europeas. Lo siguiente para los del Scariolo es recibir en el Palacio a Zalgiris el próximo jueves a las 20:45.