Precios altos para el Mundial: también protestan las personas con discapacidad; los acompañantes, obligados a pagar
El debate sobre los precios de las entradas para el próximo Mundial no remite. Football Supporters Europe (FSE), mediante una carta enviada el martes a Gianni Infantino, presidente de la FIFA, denunció las tarifas elevadas para los aficionados con discapacidad y la decisión, por primera vez en la historia del torneo, de cobrar también a los acompañantes.
Según FSE, los precios para los partidos de la fase de grupos oscilan entre 118 y 383 euros, mientras que para la final pueden alcanzar los 3.550 euros. "Es sin precedentes", subrayan los aficionados. "En los grandes torneos internacionales, las plazas para aficionados en silla de ruedas o con acceso facilitado se ofrecen generalmente a precio reducido, desde 10 euros en 2022, para compensar las dificultades y los costes adicionales que afrontan los aficionados con discapacidad".
Especialmente criticada ha sido la decisión de cobrar a los acompañantes, a menudo imprescindibles para garantizar la asistencia de quienes tienen una discapacidad: "Esto, en la práctica, duplica el coste para muchos y amenaza con dejar fuera a un amplio sector de la afición". FSE pide a la FIFA revisar y rebajar los precios, restablecer el acceso gratuito para los acompañantes, fijar un tope máximo para la reventa de entradas en las plataformas oficiales y promover un diálogo real con los representantes de los aficionados. La red concluye apelando a la responsabilidad de Infantino, recordando sus palabras en Qatar: "Hoy me siento discapacitado", un sentir que, según FSE, choca con las decisiones tarifarias actuales. La inclusión real, subrayan, debe traducirse en medidas concretas que eliminen barreras estructurales, no en gestos simbólicos.



