El culebrón Dodo y el plan para blindar a Fortini: las renovaciones de la ACF Fiorentina

Son semanas de enorme dificultad para la ACF Fiorentina, que ha llegado al parón de noviembre con el poco envidiable liderato a la inversa: colista en solitario en la tabla de la Serie A y con un recorrido tan pobre en el campeonato que, por primera vez en su historia, no ha logrado ni una sola victoria en las once jornadas iniciales del torneo.

Para colmo, en pocas semanas todo ha cambiado en la ACF Fiorentina. No solo en el banquillo, con Vanoli por Pioli, sino, sobre todo, con la promoción de Goretti de secretario técnico a director deportivo. Es lógico que ahora en el club las renovaciones no sean la prioridad, aunque las dinámicas del mercado y del fútbol obligan a no cerrar el asunto. Y no lo harán.

El culebrón que se arrastra desde hace meses se llama Dodo. Una telenovela con sabor brasileño que arrancó el pasado invierno, cuando parecía todo hecho para una renovación hasta 2029 con opción a 2030, y que se ha alargado hasta el otoño con una tensión creciente entre las partes. Hace unas semanas pareció vislumbrarse un giro con un acercamiento, pero podría quedarse en nada sin Pradè. El nuevo director deportivo, Goretti, entre otras cosas, tendrá que tomar el pulso al escenario para decidir cómo moverse en el corto plazo.

Pero en el radar de la ACF Fiorentina hay más renovaciones. Por ejemplo, desde hace tiempo el club viola negocia para ampliar más allá de 2027 al joven y prometedor lateral Niccolò Fortini, aunque la fumata blanca aún no se vislumbra. También queda por definir el caso de Pablo Marí, cuyo contrato expira al final de la temporada, si bien su acuerdo incluye una opción para añadir un año más.