
A cuartos de cabeza: la crónica del Real Madrid 1-0 Juventus
El Real Madrid se desplazó este martes al Hard Rock Stadium para medirse con la Juventus, en un duelo con una plaza en los cuartos de final del Mundial de Clubes en juego. Los blancos llegaban al partido tras una contundente victoria ante el Salzburgo, en la que los de Xabi dejaron varias muestras del fútbol que quieren proponer. En el encuentro más importante hasta la fecha en este torneo, los merengues afrontaban el desafío con varias caras nuevas en la convocatoria como las de Militão o Carvajal, que vuelven a estar disponibles tras recuperarse de sus graves lesiones de rodilla; o la de Mbappé, que ha regresado al grupo tras superar una gastroenteritis que incluso le llevó a ser ingresado en el hospital.
En un once del que volvió a quedarse fuera Rodrygo, Vinicius y Gonzalo -que sigue contando con la confianza del entrenador madridista- hicieron dupla en ataque. Fran García y Trent ocuparon los laterales de una defensa completada por Huijsen y Rüdiger, con Tchouaméni entre ellos dos, formando una línea de cinco. En el centro del campo, Valverde y Arda Güler escoltaron a un Bellingham con mayor libertad de movimientos.
EL MADRID NO ENCUENTRA LA LLAVE DEL GOL
La primera ocasión clara del partido cayó del lado bianconero: una pérdida al borde del área rival por parte de Trent originó una contra que dejó a Kolo Muani en un mano a mano ante Courtois. Sin embargo, el guardameta belga no tuvo que intervenir, ya que la definición del francés se marchó por encima del travesaño. La Juventus, bien replegada con una defensa de cinco muy compacta, obligaba a los de Xabi a imprimir velocidad en la circulación del balón. Los blancos, que no encontraban espacios por dentro ni opciones claras para jugar en largo, veían cómo los italianos generaban peligro cada vez que se aproximaban al área rival.
En las botas de Bellingham estuvo el primer tanto madridista: el inglés contó con un remate desde el área pequeña, pero Di Gregorio salvó con una gran intervención y, posteriormente, Rugani despejó el balón. Tras la pausa de hidratación, Tchouaméni dio un paso adelante por orden del entrenador merengue, posicionándose como centrocampista en la salida de balón.
En los últimos minutos de la primera mitad, el Real Madrid instaló medio equipo en campo rival, en busca de una jugada que no terminaba de llegar. Trent colgó varios centros en busca de un rematador que nunca apareció. Ya en el primero de los cuatro minutos de añadido, Valverde armó un disparo "marca de la casa" con el que estuvo a punto de batir a Di Gregorio, que desvió el balón con la yema de los dedos. Poco después, un centro tenso del lateral inglés, cargado de peligro, tampoco encontró a ningún jugador vestido de blanco. Con el tiempo añadido ya cumplido, el colegiado señaló el final de una primera parte con ocasiones para ambos equipos, pero en la que ninguno encontró la llave del gol.
GONZALO METE AL MADRID EN CUARTOS
Nada más arrancar el segundo tiempo, Valverde dio el susto a los italianos con un disparo con la zurda que se marchó muy cerca del palo derecho del portero. El Real Madrid pisaba el acelerador y Bellingham estuvo a punto de romper la igualdad en el marcador: al inglés le cayó un balón en la frontal del área y, tras dos recortes, soltó un zapatazo que obligó a Di Gregorio a lucirse con una gran parada. Acto seguido, un centro medido de Trent acabó en el 1-0 para los blancos: Gonzalo, con un poderío tremendo, se elevó en el borde del área pequeña y, con un cabezazo muy potente, abrió el marcador. Pocos minutos después, el canterano dejó su sitio a Mbappé, que debutaba en este Mundial de Clubes tras superar una gastroenteritis que incluso lo llevó al hospital.
El gol no pudo sentar de mejor manera al combinado merengue, que continuó con el control del juego en campo rival. Xabi introdujo a Modric -de nuevo ovacionado por todo el estadio- en lugar de Arda Güler, probablemente con el objetivo de seguir manteniendo el control que los blancos habían tenido durante toda la segunda mitad.
Una vez cumplido el tiempo reglamentario, el colegiado añadió cinco minutos de prolongación. La Juventus, volcada en busca del empate, no fue capaz de generar una ocasión clara de gol. Con el tiempo cumplido, el árbitro señaló el final del encuentro y el Real Madrid se convirtió así en cuartofinalista del Mundial de Clubes. Los blancos se medirán al ganador del duelo entre el Dortmund y Monterrey.