Suspendido por fuegos artificiales y humo, el Ajax–FC Groningen se reanudará a puerta cerrada

Escena surrealista en la Johan Cruijff Arena, donde el Ajax–FC Groningen de anoche fue suspendido de forma definitiva por los repetidos fuegos artificiales encendidos por la afición local. El encuentro, correspondiente a la Eredivisie, apenas llevaba cinco minutos cuando el árbitro Bas Nijhuis se vio obligado a detener el juego, envuelto por el humo que salió de la grada más caliente del Ajax.

Después de más de 40 minutos de espera y una primera suspensión, el choque se reanudó, pero solo duró unos instantes: nuevos fuegos artificiales y una densa humareda invadieron el estadio y llevaron al colegiado a dar por terminado el choque. La Federación Neerlandesa de Fútbol ha decretado que el partido se reanudará el martes a las 14:30, estrictamente a puerta cerrada.

No es un caso aislado. La Johan Cruijff Arena ya había sido escenario de incidentes similares a comienzos de mes, cuando el partido en casa ante el SC Heerenveen se interrumpió por el mismo motivo. También entonces cobró protagonismo el grupo ultra F-Side, conocido por sus coreografías extremas. Según explican los aficionados, el gesto era un homenaje al fallecido Patrick “Paddy” Overeem, figura histórica del F-Side, que murió en octubre en un accidente de barco. Pancartas, camisetas conmemorativas y varias iniciativas ya habían recordado al hincha, pero el nuevo uso de pirotecnia durante el duelo ante el FC Groningen volvió a paralizar el estadio.

Entre bengalas de humo, esperas y reanudaciones de apenas unos segundos, el partido nunca encontró continuidad. Ahora el Ajax tendrá que volver al césped sin el apoyo de su gente, mientras la alarma sigue encendida sobre la gestión del orden en los estadios neerlandeses.