Malen celebra ante la grada visitante y llueve de todo al césped: el neerlandés, golpeado

La noche de Europa League entre el Aston Villa y el Young Boys de Berna (2-1) degeneró en escenas de caos en la zona reservada a los aficionados suizos, convirtiendo el partido en un espectáculo de tensión y violencia. El episodio que lo desencadenó todo llegó en el 27’, cuando Donyell Malen, autor del 1-0, celebró cerca del sector visitante. Esa decisión encendió a la grada: desde la grada aurinegra volaron vasos, astas de banderas y todo tipo de objetos, alcanzando al delantero neerlandés en la cabeza.

La situación se desmadró aún más en el 42’, tras el segundo tanto de Malen. Esta vez, varios aficionados suizos arrancaron y arrojaron asientos hacia el terreno de juego. El capitán del Young Boys, Loris Benito, intentó sin éxito calmar a los suyos. La llegada de la policía británica, lejos de apaciguar los ánimos, generó nuevas tensiones: se produjeron enfrentamientos y siguieron volando objetos contra los agentes. Varios hinchas fueron expulsados del estadio antes del descanso.

Tras el partido, el técnico Gerardo Seoane criticó que Malen fuera a celebrar cerca de la grada rival, pero presentó igualmente disculpas oficiales por el comportamiento de sus aficionados. Calificó todo lo sucedido de “desafortunado y contrario a los valores del club” y recalcó que la reacción fue desproporcionada y perjudicial para todas las partes implicadas.