Inter FC, las relaciones con Atalanta y el carril diestro: por qué Marotta fue tajante con Palestra

“Puedo descartar de forma categórica a Palestra. Inútil mirar caminos que no llevan a nada”. El presidente del Inter FC, Beppe Marotta, antes de la victoria ante Atalanta, cerró de forma muy clara una hipótesis de mercado para la banda derecha del Inter FC, la que conduce al codiciado Marco Palestra. El talento de 2005 de la Dea, hoy cedido al Cagliari, gusta a muchos, pero al Inter FC, parece que no.

Por qué fue tajante. Ante todo, está Atalanta: Palestra es un activo de futuro para el club bergamasco, que difícilmente se desprenderá de él a corto plazo; más bien al contrario. Es mucho más fácil imaginar que, antes de protagonizar una venta quizá multimillonaria, Palestra juegue en Bérgamo, al menos durante un tiempo. Las relaciones entre ambos clubes son buenas, pero el último intento de cerrar una operación —Lookman— no salió precisamente bien. Se puede hablar, pero no es tan sencillo. Y, en este caso concreto, el Cagliari también tiene interés en retener al jugador hasta verano o, como mínimo, en monetizar una eventual salida anticipada.

Las reflexiones en la derecha. Explicado el no rotundo a Palestra, hay además un asunto más amplio. En la derecha, el Inter FC debe cubrir, al menos hasta marzo, la baja de Dumfries. Sobre el papel, el sustituto ya está en casa. De hecho, hay al menos dos: está Darmian, alternativa también para la zaga, gran ausente de este primer tramo de temporada. Y, sobre todo, Luis Henrique, por quien en verano se pagaron 25 millones de euros. Sin olvidar que Andy Diouf ha demostrado poder ocupar ese rol. Eso no impide que el Inter FC piense seriamente en un refuerzo, quizá temporal. Pero difícilmente será caro y complejo como Palestra. Y tendría que ser alguien listo para competir —Valincic o Kyriani Sabbe han sonado, pero son muy jóvenes— y que, además, sea una oportunidad de mercado. Un perfil tipo Dodò, para entendernos, sobre el que de momento no hay grandes novedades. En ausencia de una oportunidad real, tanto deportiva como económica, no está nada claro que los nerazzurri muevan ficha.