FIGC publica el Informe Integrado: el fútbol aporta 12,4 mil millones al PIB italiano

A través de sus canales oficiales, la FIGC ha publicado la décima edición del Informe Integrado, la radiografía del impacto del fútbol en Italia, un país donde alrededor de 4,3 millones de personas juegan al fútbol. La Federación cuenta hoy con unos 1,5 millones de federados, dato al alza respecto a la última edición: 1,1 millones son futbolistas, de los cuales 900.000 son jóvenes. Casi uno de cada cuatro chicos italianos entre 5 y 16 años está federado, mientras que uno de cada dos niños de 3 a 10 practica fútbol, con 600.000 partidos oficiales (uno cada 54 segundos) que se disputan cada año en 15.000 campos de juego.

En el plano económico, el impacto sobre el PIB italiano se estima en 12,4 mil millones de euros (el año pasado fue de 11,3 mil millones), con 141.000 puestos de trabajo activados y 3,5 mil millones en contribución fiscal. Un potencial aún por explotar, se lee, dado que hoy hay más de 30 proyectos para la construcción de nuevos estadios en fase de planificación o ejecución en el país, con una inversión prevista de 5,1 mil millones de euros (más de 820.000 asientos). Este programa de inversiones, si se materializa, podría aportar además 6,1 mil millones de euros al PIB italiano (en un horizonte plurianual), con casi 80.000 nuevos empleos, mientras que los ingresos fiscales generados se estiman en más de 1,8 mil millones.

Los ingresos directos totales ascienden a casi 7 mil millones de euros, y la contribución fiscal y a la Seguridad Social del solo sistema profesional en los últimos 17 años rozó, en términos agregados, los 20 mil millones de euros (por cada euro “invertido” por el Gobierno italiano en el fútbol, el país ha obtenido un retorno fiscal y de cotizaciones de 20,5 euros, generando un impacto socioeconómico excepcional). Los 99 clubes profesionales aportan por sí solos más de 7 de cada 10 euros (el 70,1%) entre los generados por la contribución del deporte italiano (50.000 clubes, empresas y entidades).

“Por su capacidad única para unir personas, territorios y generaciones, el fútbol tiene una responsabilidad que va más allá de la competición y el rendimiento —afirma el presidente Gabriele Gravina—. Por eso la FIGC ha decidido emprender un camino decidido y estructurado en el ámbito de la sostenibilidad social y medioambiental. Queremos que el fútbol sea un auténtico motor de cambio, capaz de producir valor duradero, material e inmaterial, para la comunidad. Este documento rinde cuentas de los resultados obtenidos en un año de extraordinaria evolución, en el que hemos asumido retos que parecían alejados de nuestro mundo y que, en cambio, han generado un impacto muy positivo. La inclusión, la promoción de los jóvenes, la educación, la protección de la salud y del medio ambiente son solo algunos de los temas que hacen hoy del fútbol una plataforma social sin igual, que merece aún más atención por su compromiso y por los resultados en beneficio de la sociedad civil”.

Los principales programas estratégicos impulsados por la FIGC. A las dificultades de la Selección masculina se contraponen los grandes resultados de la femenina —la semifinal mundial contra Inglaterra firmó 4,1 millones de espectadores en TV, la segunda mejor audiencia en la historia del fútbol femenino italiano— y de las categorías inferiores, con la conquista en 2024 del primer título europeo Sub-17. Además del desarrollo de las Selecciones, en 2024 la Federación también ha sacado adelante el resto de programas estratégicos de referencia, empezando por la puesta en valor de la actividad de base, en lo deportivo, educativo y social. Destaca, en particular, el acuerdo marco entre la FIGC y el Ministerio de Educación y Mérito, destinado a promover la actividad deportiva y a sensibilizar a los jóvenes en el respeto, el juego limpio en las gradas y la inclusión; en el marco del macroproyecto de actividades didácticas, motrices y socioeducativas “Valori in Rete”, entre 2016 y 2024 se involucró a casi un millón de estudiantes.

Siguiendo una tendencia ya consolidada en las organizaciones deportivas de alto nivel, otro eje cada vez más central en la acción federativa es el de la Sostenibilidad: la FIGC es la primera federación deportiva en Italia que ha presentado su propia estrategia, inspirada en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y en la Estrategia de Sostenibilidad de la UEFA, con la identificación de más de 60 KPI (Key Performance Indicators) y 70 objetivos estratégicos claros, medibles y monitorizables que el fútbol italiano, entendido como un único ecosistema, pretende alcanzar de aquí a 2030 en 11 políticas diferentes en el ámbito de los derechos humanos y la protección medioambiental:

· Antirracismo. En 2024, la Federación continuó por tercer año consecutivo con la campaña “#UnitiDagliStessiColori”, que visibiliza las distintas etnias a través de los colores primarios.

· Protección y Bienestar del Menor (Safeguarding). La Federación fue la primera en dotarse de un sistema estructurado de “Safeguarding”, junto a un portal web (figc-tutelaminori.it) que ha permitido impartir más de 50.000 cursos de formación.

· Igualdad e Inclusión. La Federación siguió desarrollando proyectos para los colectivos más vulnerables, como “Zona Luce” (centros penitenciarios juveniles) e iniciativas socioeducativas y solidarias en apoyo de algunas de las zonas más desfavorecidas del territorio (Caivano, Corviale, Tamburi), junto a campañas sobre temas como la violencia de género.

· Fútbol para Todas las Capacidades. La FIGC es la primera federación deportiva del mundo que ha creado en su seno una división para la Actividad Paralímpica y Experimental, con la participación en la temporada 2024-25 de más de 4.000 federados con discapacidades cognitivas y trastornos psiquiátricos.

· Salud y Bienestar. Desde 1995, la FIGC apoya a la Fundación AIRC con el proyecto “Un Gol per la Ricerca”, que en los últimos diez años ha generado donaciones por más de 550.000 euros.

· Apoyo a los Refugiados. El principal proyecto sigue siendo “RETE! Refugee TEams”, que en 10 años ha permitido involucrar en actividades deportivas y socioeducativas a más de 10.000 menores extranjeros no acompañados y solicitantes de protección internacional.

· Emergencias y Derechos. Se ha prestado cada vez más atención a las emergencias humanitarias, con especial referencia a Ucrania, a raíz del acuerdo marco firmado entre la FIGC y la federación local de fútbol en 2024. Cabe destacar, entre otras iniciativas, la organización de dos encuentros para chicos y chicas ucranianos con las selecciones absolutas en Coverciano.

· Economía Circular. Se han implementado acciones de economía circular en las áreas de hospitality que han supuesto la eliminación del plástico, la elección de menús inclusivos de bajo impacto ambiental, la gestión sostenible de residuos y la redistribución de excedentes alimentarios a personas en situación de vulnerabilidad.

· Emergencia Climática. Se llevó a cabo el proyecto “SeminiAMO il futuro”, que prevé la plantación de 260 árboles en la Masseria Antonio Esposito Ferraioli, el mayor bien confiscado a la mafia, lo que permitirá absorber 28 toneladas de CO₂.

· Sostenibilidad de los Eventos. Se introdujo el servicio de audiodescripción para aficionados ciegos en los partidos de la Selección, junto con “Quiet Room” para jóvenes con autismo o discapacidad. Se ha puesto en marcha un nuevo procedimiento para la organización de los partidos de las Selecciones centrado en la sostenibilidad ambiental y social.

· Sostenibilidad de las Infraestructuras: El principal proyecto sigue siendo “Coverciano 3.0”, que, una vez plenamente operativo, conllevará la instalación en el Centro Técnico Federal de paneles fotovoltaicos sobre una superficie de unos 4.000 m², con el objetivo de reducir el consumo de energía primaria en un 32,5% de aquí a 2030.

Como complemento al camino orientado a la Sostenibilidad, a lo largo de 2024 se lanzó además “Sostenabilia” (www.sostenabilia.it), una plataforma multimedia creada para poner en valor y reunir en un único contenedor todas las iniciativas desarrolladas en el marco de la Estrategia de Sostenibilidad Social y Ambiental de la FIGC. Una iniciativa innovadora que en poco tiempo ha traspasado también las fronteras de la web para convertirse en una auténtica ‘brand’, donde se integran y, sobre todo, se reconocen las actividades sostenibles promovidas por la Federación.