Quiero Champions y Mundial

No recuerdo una temporada tan larga como esta. En la máxima competición de nuestro país hay 10 equipos que llevan en tierra de nadie desde mediados de febrero. Salvo imprevisto, el Barcelona era campeón desde principios de marzo. Una anomalía que duerme a cualquiera. En la rifa de LaLiga ya ni hay jamón envasado con colines duros, solamente quedan dos puestos de Europa tirando por lo alto y una plaza de permanencia si el Deportivo sigue ganando partidos. Tanto el derbi como el Madrid vs Athletic fueron meros partidos de entrenamiento donde los puntos en juego eran anecdóticos y eso la gente lo nota. No anima. No se levanta. No sufre. Y no se divierte. 

Los que no están en Europa ya quieren Mundial. Y los que no están en el Mundial desean que llegue verano. Por lo menos, tenemos dos competiciones europeas con Madrid y Atlético en representación del fútbol español para poder consolarnos. Porque cuando suena el himno de la Champions todo cambia. El fútbol vuelve a su hábitat. La gente ya anima. Se levanta. Sufre. Y se divierte. Ayer por los aledaños del Santiago Bernabéu palpaba un ambiente apagado. Los futboleros iban al estadio obligados por ya haber pagado su abono. Incluso, se empezaban a ver muchas localidades libres. 

El Real Madrid es el fiel reflejo del comportamiento de los aficionados. En Liga desmotivados. En Champions enchufados. Esa es la realidad. Quizá, el fútbol sature más de la cuenta con dos partidos por semana. Se explota como buen negocio que es, pero no estaría mal dosificarlo de alguna manera. Esto no justifica que el conjunto blanco se haya dejado en su fortín 15 puntos en Liga. Betis, Barcelona, Villarreal, Valencia, Atlético y Athletic han puntuado en el Santiago Bernabéu, mismo estadio donde al todopoderoso PSG le cayeron tres. 

Quiero Champions y Mundial...