Cuando el Sub-23 te hace perder (o casi) un año. Palestra maravilla a todos en Cagliari
Hay un cortocircuito en la gestión de Marco Palestra por parte del Atalanta. Porque la pasada temporada, tras un año como protagonista con el Sub-23 y debutar en la Europa League ante el Raków, parecía listo para tener ya un papel importante en un club de Serie A. Sin embargo, se quedó en el Atalanta porque podía (quizá) completar su maduración con el Sub-23 y luego ser útil en el primer equipo. En realidad disputó 15 partidos con el equipo de Gasperini —la mayoría, minutos sueltos— y quizá perdió un año que podía haberle proyectado ya hacia una grande esta campaña. Incluso a la propia Atalanta, visto que Palestra está maravillando en Cagliari.
Por eso las grandes le siguen de cerca, en particular el SSC Napoli. Y, claro, en ese puesto también Inter FC y Juventus le dan vueltas: por un lado, hay que ver quién puede alternarse con Dumfries o sustituirle; en el conjunto bianconero hay un vacío ahora ocupado por Kalulu. En cualquier caso, su tasación será altísima de cara a junio. Hace un año ya le tanteó el Rennes, con una oferta interesante, que el Atalanta rechazó.
Ha sido una paradoja, pero ha llegado a Cagliari quizá más hecho de lo que se pensaba. Nunca habrá una contraprueba para saber si fue mejor o peor; lo que está claro es que su perfil apunta a ser uno de los nombres propios del mercado.



